
La parroquia de Sonseca comienza su Semana Santa el Viernes de Dolores, que conmemora el dolor de la SantĆsima Virgen MarĆa por la muerte de su hijo Jesucristo.
El Viernes de Dolores los sonsecanos acuden al Cristo de la Vera Cruz para rendir homenaje a la Virgen MarĆa y para acompaƱarla en su dolor.Ā Por la tarde, despuĆ©s de la Santa Misa hay procesión por las calles del pueblo.
Ā Los Siete Dolores de la Virgen MarĆa.
Cada uno de estos dolores representa un momento de gran dolor y sufrimiento para la Madre de JesĆŗs, y son una muestra de su gran amor y entrega por su hijo.
El primer dolor de la Virgen MarĆa se produjo en la presentación del NiƱo JesĆŗs en el Templo de JerusalĆ©n. AllĆ, el anciano Simeón profetizó que JesĆŗs serĆa la causa de la caĆda y el levantamiento de muchos en Israel, y que una espada atravesarĆa el alma de MarĆa.
El segundo dolor se produjo cuando la Virgen MarĆa tuvo que huir a Egipto con el NiƱo JesĆŗs para escapar de la orden de asesinato de Herodes. Durante su exilio, MarĆa y JosĆ© tuvieron que enfrentar numerosas dificultades y peligros, pero su fe y su amor por JesĆŗs les permitió superarlos.
El tercer dolor se produjo cuando JesĆŗs tenĆa 12 aƱos y se perdió durante tres dĆas en el Templo de JerusalĆ©n. MarĆa y JosĆ© lo buscaron con desesperación, hasta que finalmente lo encontraron en el Templo, enseƱando a los rabinos.
El cuarto dolor se produjo durante el camino de Jesús al Calvario, cuando se encontró con su madre. Ambos se miraron con dolor y amor, conscientes del sufrimiento que les esperaba.
El quinto dolor es el mĆ”s conocido, y se produce durante la crucifixión y posterior agonĆa de Jesucristo. La Virgen MarĆa estuvo presente en todo momento, sufriendo junto a su hijo y compartiendo su dolor.
El sexto dolor se produjo cuando la Virgen MarĆa recibió el cuerpo sin vida de su hijo despuĆ©s de ser bajado de la cruz. Este momento fue especialmente doloroso para ella, ya que tuvo que enfrentar la realidad de su muerte y aceptar que ya no estarĆa con ella.
El sĆ©ptimo y Ćŗltimo dolor se produjo durante el entierro de Jesucristo, cuando la Virgen MarĆa se quedó sola y sintió una gran soledad y tristeza. Este momento representa el final de la Pasión, pero tambiĆ©n el comienzo de la esperanza, ya que la Resurrección de JesĆŗs demostró que el amor de Dios es mĆ”s fuerte que la muerte.
Fotos: Salva Peces de S.